miércoles, 19 de diciembre de 2012

Las sandalias de Tutankamón



Tutankamón era hijo de Akenatón (antes Amenofis IV) y una hermana suya conocida hoy día por KV35YL (que significa “la dama joven de la tumba 35 del Valle de los Reyes”). Como príncipe también fue llamado Tutanjatón. Ascendió al trono  a la edad de nueve o diez años. Su nodriza fue una mujer llamada Maia, conocida por una tumba en Saqqara. Curiosamente el nombre suena muy parecido al de la madre de Hermes, a la de Buda y al de la Virgen María.

Maia y Tut en Saqqara

Cuando Tut ascendió al trono, se casó con su media hermana, Anjesenpaatón, que más tarde cambió su nombre por el de Ankhesenamón. Tuvieron dos hijas que son los fetos encontrados en la tumba de Tut. Estudios de tomografía computerizada realizados en 2011 revelaron que una hija murió a los 5-6 meses de embarazo y la otra a los 9 meses de embarazo. No se encontró evidencia en las momias de anomalías congénitas o una causa aparente de la muerte. 


El culto de Amón:
                                 
En su año de reinado tercero, Tutankamón invierte algunos cambiosv en política religiosa realizados durante el reinado de su padre. No desaparece la adoración del dios Atón pero si restauró al dios Amón a la supremacía. Los privilegios tradicionales  regresaron a los viejos sacerdotes de Amón . La capital se trasladó de nuevo a Tebas y poco a poco se abandonó la capital de Aketatón. En esa época es también cuando cambió su nombre por el de Tutankamón, conforme a la política de normalización y normatización lingüística del Imperio Nuevo Tebano.

Como parte de su restauración, el rey inició proyectos de construcción, en particular en Tebas.  En Karnak dedicó un templo a Amón. Las fiestas tradicionales se celebraron  de nuevo, incluidos los festivos relacionados con el toro Apis, Horemakhet y Opet. 

Una estela de cuarcita de propaganda de la restauración del templo de Karnak conservada en el Museo del Cairo dice:


"Los templos de los dioses y las diosas ... estaban en ruinas. Sus santuarios estaban desiertos y con mucha vegetación. Sus santuarios eran tan inexistentes y sus cortes fueron utilizadas como caminos ... los dioses le dieron la espalda a esta tierra ... Si alguien hizo una oración a un dios para el consejo él nunca respondió".

Política exterior

El país era económicamente débil y sufría una en crisis tras el reinado de Akhenaton. Las relaciones diplomáticas con otros reinos se habían descuidado, y Tutankamón las trató de restaurar, en particular con los asiáticos de Mitanni y Hatti. La prueba de su éxito se puede ver en los dones de varios países que se encuentran en su tumba, como algún cuchillo de hierro, la avanzada tecnología extranjera de los asiaticos del Norte. 
A pesar de sus esfuerzos para mejorar la diplomacia, se pueden ver imágenes de batallas contra los nubios y asiáticos en su templo funerario de Tebas. Además, en su tumba se encontraron chalecos antiproyectiles y taburetes plegables de esos que se llevan a las campañas militares. 

Sin embargo, dada su juventud (murió con 19 años) y cierta discapacidad física, que parece necesitar el uso de un bastón para caminar, los historiadores sospechan que él personalmente no pudo tomar parte en estas batallas. 




En la tumba de Tut (KV62) se encontraron unas sandalias doradas en una caja de madera con una etiqueta que ponía "Sandalias de papiro de Su Majestad- Vida- Prosperidad- Salud". En la plantilla se pueden ver dos figuras de nubios y asiáticos cautivos. Arriba y abajo aparecen cuatro arcos que representan a los enemigos tradicionales de Egipto (que son distintos en su larga historia), los llamados Nueve Arcos, (aunque en realidad solo aparecen ocho en cada zapatilla). De esta manera, al caminar, el rey de Egipto aplastaba simbolicamente a sus enemigos. Howard Carter tuvo que realizar auténticas birguerias con parafina para que no se le deshicieran en pequeñas cuentas.Las zapatillas miden unos 28 cm de largo, aproximadamente una talla 41-42 en Europa.

Salud y apariencia

Tutankamón era de complexión delgada (como todas las momias…). Se calculó su altura a partir de la longitud de sus huesos largos de las piernas. En aborígenes australianos y en algunos pueblos de África que tienen las piernas largas, puede llegar a ser de un 54% de la altura total, en cambio en algunas zonas de Asia es de un 45%  por eso las cifras bailan entre 163 y unos 180 cm. Lo más probable es que su altura coincidiera con las dos estatuas de 169 cm encontradas en su tumba. Además es más coherente con el tamaño de sus sandalias.


En la cabeza, tenía unos grandes incisivos frontales y las características de la sobremordida de los Tutmosidas, dinastía real a la que pertenecía.
El cráneo tiende a ser dolicocéfalo (alargado), aunque estaba dentro de límites normales y es poco probable que haya sido patológico. Puesto que en algunas representaciones de Akenatón a  menudo aparece con una cabeza alargada, es probable una exageración de un rasgo de la familia, un signo de preponderancia como la aureola de los santos, un sombrero o la libertad de la escuela del artista de la corte.
La investigación también mostró que Tutankamón tenía un paladar hendido ligeramente y, posiblemente, un caso leve de escoliosis vertebral.

En junio de 2010, científicos alemanes supusieron  que la causa de la muerta pudo haber sido la anemia de células falciformes o drepanocitosis. Se trata de una enfermedad de origen genético más frecuente en poblaciones mediterráneas y africanas que se caracteriza porque el eritrocito se deforma y adquiere apariencia de una hoz. La forma afecta a la elasticidad celular, provoca dificultad para la circulación que obstruye los vasos sanguíneos y causa síntomas como dolor en las extremidades. Además, los glóbulos rojos deformados son menos resistentes lo que provoca anemia. Sin embargo, parece demostrado que la drepanocitosis aumenta las posibilidades de sobrevivir a la infección por malaria.

Glóbulos rojos parasitados

En septiembre de 2010  la revista norteamericana  National Geographic señaló que Tutankamón, resultado de una relación incestuosa pudo haber sufrido varios defectos genéticos que también pudieron contribuir a su muerte prematura. Durante años, los científicos han tratado de desentrañar pistas antiguas para averiguar por qué el niño rey niño de Egipto, que reinó durante 10 años, murió a la edad de 19 años. Varias teorías han sido propuestas, con más o menos éxito:

·          asesinado por un golpe en la cabeza, golpeado por un bastón por la espalda
·          que su muerte fue causada por una pierna rota, producida por una caída del carro al sufrir una crisis epiléptica de lóbulo temporal
·         diversas enfermedades genéticas involucrados como el síndrome de Marfan, Wilson-Turner ligado al cromosoma X,  cualquier síndrome de retraso mental (¿?), síndrome de Fröhlich (distrofia adiposogenital, éste aparece en el libro de Patología de Pedro Pons), síndrome de Klinefelter, de Antley- Bixler…


El maldito DNA:

Finalmente las pruebas de ADN han resuelto las dudas sobre el linaje de Tutankamón, probando que su padre fue Akenatón, pero que su madre era una de las cinco hermanas de Akhenatón, aunque no se sabe cuál. 



El equipo fue capaz de determinar con una probabilidad de más del 99,99 % que Amenhotep III fue el padre del individuo de la tumba KV55, que a su vez era el padre de Tutankamón. El ADN de la Dama Joven (KV35YL), que se descubrió acostada al lado de la reina Tiye (KV35EL) en el escondrijo de la tumba KV35, también coincidía con el del niño rey. Su ADN demostró que, como Akenatón, fue un hijo de Amenhotep III y Tiye. Así, los padres de Tutankamón eran hermano y hermana. KV35YL se parece horrores a los retratos de Nefertiti, con su cuello largo y su cráneo alargado, pero no puede ser porque se considera que Nefertititi no es hija de Amenofis III y Tiye sino de Ay. Un señor muy irascible en Egipto que se enfada mucho si alguien se lo sugiere.

La abuela Tiye conservó mucha influencia política en la corte y pudo actuar como asesor de su hijo después de la muerte de su marido Amenofis III. También se conserva la momia del bisabuelo Yuya en muy buen estado. Es una de las pocas momias egipcias de la época con barba y Christian Jacq dice que se parece mucho al actor Charlton Heston en su libro de Akenaton y Nefertiti.


Aunque los datos son todavía incompletos, el estudio sugiere que uno de los fetos momificados encontrados en la tumba de Tutankamón es hija de Tutankamón, y el otro feto es probablemente su hijo también.

Hasta el momento, sólo se han obtenido datos parciales de las dos momias femeninas de KV21 . Una de ellas, KV21A, puede muy bien ser la madre de los bebés y, por tanto, la esposa de Tutankamón, Ankhesenamón. Se sabe por la historia que ella era la hija de Ajenatón y Nefertiti, y por lo tanto es probable que sea hermanastra de su marido.
El análisis de huellas de ADN en combinación con otras técnicas han rechazado la hipótesis de la ginecomastia y craneosinostosis (por ejemplo, Antley-Bixler) o el síndrome de Marfan.

También se hallaron genes específicos para Plasmodium falciparum, agente causal de la peor forma de malaria o paludismo. La malaria pudo ser la causa de un shock séptico o causar una respuesta inmune fatal en el organismo que conduce a la muerte. Si además se añade una enfermedad de los huesos y una fractura, ésta pudo haber sido fatal. Sin embargo, su bisabuelo Yuya presentaba los mismos marcadores genéticos de paludismo y sobrevivió hasta una edad avanzada (más de 50 años).


Los mentirosos rayos X:

Las investigaciones realizadas por los arqueólogos, radiólogos y genetistas que comenzaron a realizar tomografías computerizadas a Tutankamón en 2005 revelaron que no fue asesinado por un golpe en la cabeza, como se pensaba. El golpe se lo dieron después de muerto, al embalsamarlo. 

Aunque existe cierta especulación de que Tutankamón fuera asesinado, el consenso es que su muerte fue accidental. Una tomografía computarizada tomada en 2005, muestra que se había roto una pierna mal poco antes de su muerte, y que la pierna se habría infectado. 

Se han encontrado más de 100 bastones en la tumba de Tut KV62 lo que parece relacionado con su posible cojera. Aunque coleccionar tantos bastones le habría llevado bastante tiempo, lo que implicaría ciertas dificultades para caminar anteriores a la caída. Uno de los bastones lo fabricó el propio faraón con una caña.

Una radiografía del pie derecho de Tut diagnosticó una posible osteocondritis en el 2ªmetatarsiano, llamada enfermedad de Freiberg o Köhler II. Freiberg fue un cirujano americano conocido como el filósofo de la cirugía ortopédica. Describió a principios de siglo XX la osteocondritis del 2º dedo del pie típica de jóvenes en la 2ªdécada de la vida y la atribuyó a un origen traumático. Alban Kohler fue un radiólogo alemán autor de la Biblia de la Radiología, que atribuye a la osteocondritis un origen vascular, más o menos en la misma época de Freiberg. No son incompatibles las dos teorías ya que el segundo meta es el más largo (vascularización más complicada) y el menos móvil (menor resistencia a traumatismos).

En las zapatillas de Tut, uno de los cordales se inserta en la suela algo desplazado hacia el lado interno, en el primer espacio interdigital. En la otra, está más desplazado hacia el centro, puede que para evitar la presión sobre la cabeza del segundo metatarsiano (siempre que le hubieran hecho los zapatos a medida).

En 2012, ABC News hizo un artículo sobre una nueva teoría sobre la muerte de Tutankamón con información procedente del Dr. Hutan Ashrafian que creía que la epilepsia del lóbulo temporal causó la caída fatal en que se rompió la pierna de Tutankamón. La enfermedad se produce por una malformación vascular cerebral.  Una crisis temporal puede provocar emociones intensas e inexplicadas (esto pega más con la biografía de Akenatón que con la de Tut) y a veces movimientos complejos inconscientes.
  
El final de una dinastía (la XVIII)

Con la muerte de Tutankamón y de los dos niños nacidos muertos enterrados con él, la línea de la familia Tutmosida llegó a su fin. Las cartas de Amarna indican que la esposa de Tutankamón, recientemente viuda, escribió al rey hitita Suppiluliuma I, preguntando si podía casarse con uno de sus hijos. Las letras no dicen cómo falleció Tutankamón. En el mensaje al rey hitita, Ankhesenamón (¿?) decía que tenía mucho miedo y buscaba la protección de uno de sus hijos como marido. Sin embargo, el príncipe murió por el camino antes de llegar a ver su nueva esposa (casualmente). 

En esa época o poco después Ay, casado con la viuda de Tutankamón, se convirtió en faraón. Estalló una guerra entre los dos países y Egipto fue derrotado. El destino de Ankhesenamón no se conoce, pero pronto desapareció y Tey, la segunda esposa de Ay, se convirtió en Gran Esposa Real. 

Después de la muerte de Ay, Horemheb heredó el trono y comenzó una campaña contra los hititas para arreglar cuentas con los asiáticos. Esto le tuvo entretenido tanto tiempo que apenas se conocen construcciones de su larguísimo reinado. Horemheb legó el trono a su yerno Ramsés I, fundador de la dinastía Ramésida de los faraones. Su tumba KV57 parece bastante inacabada en su decoración y con pinta de haber sido reutilizada. Todavía no se ha encontrado su momia, ni tampoco la de Ay, pero no es imposible que aparezca en un futuro, a lo mejor en una tumba intacta y perfectamente rematada, el tercer gran escondrijo.

Es común que los reyes sean venerados después de su muerte mediante cultos mortuorios en templos dedicados a su memoria. Tutankamón fue uno de los pocos reyes venerados de esta manera durante su vida. Los templos de su culto se construyeron en lugares tan lejanos como Kawa y Faras en Nubia. Incluso después de pisar al enemigo, debió dejar una buena imagen.


jueves, 22 de noviembre de 2012

EVENTOS DE CANDO (OUTES)


Un OVNI extraño:

La tarde del 18 de enero de 1.994, día de cumpleaños de Kevin Costner,  el cielo estaba despejado en el Norte de la Gallaecia. Algunos desgraciados no pudieron disfrutar del maravilloso clima por estar amargados a causa de un examen de inglés sorpresa de BUP..., pero según la agencia estatal de climatología, la visibilidad era de 15 km y no había nubes de desarrollo vertical. En esa apacible tarde para meteorólogos y cinéfilos, comienzan a documentarse una serie de extrañas llamadas al SOS Galicia sobre un objeto luminoso seguido de una estela que atravesaba el cielo a gran velocidad. Estas alertas se produjeron más o menos consecutivamente desde lugares de O Portiño (Coruña), Brion, Muros, Santiago y varias zonas de Pontevedra.

En los días siguientes, algunos diarios y programas de radio comentan la noticia en un tono más o menos jocoso e informal. Sobre el origen de la “cosa” empiezan a brotar algunas hipótesis:
1)     Fenómeno natural: asteroide, meteorito, cometa... No parece por lo siguiente:
  • se estimó la velocidad del “objeto” en 1-3 km/seg, cuando un asteroide se la pega a una velocidad de 30-70 km/seg (si no se equivoca Newton)
  • debido a su brillo, el objeto se observa a unos 2 km de altura
  • nadie ha escuchado el ruido típico de los bólidos (al entrar en la atmósfera y al pegársela contra el suelo)
  •       en general, las cosas que caen del cielo no siguen trayectorias caprichosas e impredecibles,   con cambios bruscos de dirección.

2) Fenómeno artificial: avión, satélite, nave espacial... Es una hipótesis más lógica:
El European Space Center reconoce en ese día la caída del satélite Navstar 2-07 en el Pacífico Sur. Pero satélite se la pegó a las 09:18 horas. Aun  podrían ser varios trozos de chatarra desprendidos... ¿Pero dónde han caído?
En el mes de abril se documenta en Cando de Arriba, parroquia de San Tirso de Cando, en Outes, la existencia de un cráter de 29m de largo por 13m de ancho y 1,5m de profundidad. Alrededor hay árboles arrancados y desplazados. Si el OVNI y el cráter están relacionados, en el lugar del presunto impacto:
  • no hay restos de objetos artificiales
  • no hay restos de origen meteórico: Ni, Fe...

Por ello, la tercera hipótesis es...

      3)      Ensayo militar secreto con un arma de “plasma”...
Aparentemente, el objeto volador seguía una trayectoria desde el Cantábrico, entrando en el espacio aéreo gallego entre Ferrol y Coruña y siguiendo en dirección Muros-Noya. Un buque de la Armada, haciendo prácticas de tiro, comete un pequeño error y el misil sale volando en dirección contraria, hacia tierra...
Existe un radar militar del Escuadrón de Vigilancia Aérea, el EVA 10, situado en el acuartelamiento aéreo de Barbanza (Noya) en el monte Iroite (si, el del arca de Noé) desde 1980. Se encuentra a menos de 20 km del “cráter de Cando”. Y no vieron ni oyeron nada. Esta claro que Ovnis, santos y vírgenes nunca se aparecen a gente fiable…

Este destacamento militar no tiene motivos para ocultar nada. En un documento desclasificado del ejército, con fecha 23 de noviembre de 1993, a las 08:15 horas describe el avistamiento de un “cuerpo verde con estela blanca a velocidad vertiginosa”. Y no pasa nada.

      4)     La explicación oficial del suceso de Cando, difundida por la Universidad de Santiago y con la aportación de instituciones gallegas y checas es que el cráter de Cando se produjo por causas naturales, desligando el evento de los avistamientos anteriores. Un “corrimiento explosivo" de tierras provocado por la deflagración de una bolsa de gas natural”. Es decir, algo tremendamente tranquilizador…

El 22 de noviembre de 2000 se repite “o fenómeno” en los montes de Cornande, en Brion, cerca de Outes. Y las empresas del gas natural sin enterarse... todo muy tranquilizador.

Signos astrológicos de la Antigüedad:

Outes es una región que ha sido visitada desde la antigüedad por gente de variado pelaje y extrañas aficiones artísticas.
En la Edad de Bronce se dibujaron unos petroglifos de Fontemoureira, en la parroquia de Freixo. Son unos círculos concéntricos con arcos radiales parecidos a dianas. El mayor tiene 1m de diámetro. Se interpretan como signos astrológicos o topográficos (¿un mapa?).

Parece una diana, o un juego de la Oca
Los romanos construyeron caminos para unir ciudades y también inventaron las estaciones de servicio, los chiringuitos de carretera y los spa. Según una de las más renombradas guías de viaje de la antigüedad, el Itinerario de Antonino, en Galicia la carretera principal era la Via XX Per Loca Marítima. Se supone que unía Braga con Iria Flavia y Lugo. Gran cantidad de redes secundarias atravesaban la región. Una de ellas llegaba al Parvo Portus Artabrorum (¿Muros?).
Existe una estela funeraria de granito conservada en el museo de la catedral de Santiago, que fue encontrada en Cando. Aunque el romano cabezón parece un extraterrestre del tipo  “pequeños cabezones y grises con ojos almendrados”, debemos creer que en realidad es un paisano terrestre por la inscripción “Dis Manibus (D.M.) Titulum (TI) Posuit (POS) Victoriannorum LXV Faustina Patri” (P).

Estela funeraria de romano con Sol y luna.
Se encuentra en el museo de la Catedral de Santiago.
Después de la caída de Roma, llegaron a estas tierras los germanos. Pero los indígenas siguieron con sus aficiones a la decoración de piedras. En aquellos tiempos se grabaron los Gliptogrifos de Carballa, atribuídos a un eremita que debía vivir en una cueva y tenía mucho tiempo libre. Se trata de una serie de unos 150 dibujos que abarcan una extensión de poco más de 20 metros cuadrados. Guardan un gran parecido con los de la Edad de Bronce, aunque en teoría son muy posteriores.

Las cruces pueden ser signos cristianos o figuras humanas esquemáticas


domingo, 9 de septiembre de 2012

El collar maldito II: Griegos, Celtas y Romanos


Guerras del Santuario:


El culto de los oráculos era un medio de comunicación del ser humano con la divinidad utilizado desde muy antiguo. Los estados griegos o los ciudadanos particulares querían el consejo de los dioses para tomar las mejores decisiones en la vida u obtener la respuesta a una solicitud…


Los dos santuarios más importantes eran el de Zeus en Dodona (Epiro) y el de Apolo en Delfos (Fócida).
El templo de Dodona...

El Santuario de Dodona era el más antiguo…
… recibía solicitudes que se grababan en láminas de bronce con un estilete. De esta manera se conservan las solicitudes de los grandes Estados como la Esparta de Agesilao en su guerra contra Persia, Esparta antes de la batalla de Leuctra (571). Pero también de los simples ciudadanos sobre familia, viajes, oficios, infidelidades…
…las respuestas se basaban en la interpretación de tres tipos de signos: el ruido de palomas (pleiades), murmullo de las hojas del roble sagrado y (a partir del VIII A.C.) el ruido de los calderos de bronce colocados sobre trípodes al ser golpeados con unas cadenas (a partir del IV AC solo se conservana un caldero y los de Corfú instalaron la estatuilla de bronce de un niño con el látigo de Corcira que golpeaba el caldero cuando soplaba el viento). La interpretación dependía de los sacerdotes selios, de la tribu de los tesprotos, que nunca se lavaban los pies y dormían en el suelo...


El Santuario de Delfos era el más importante…
… las solicitudes al oráculo se realizaban sobre materiales perecederos o de viva voz, motivo por el cual sólo se conservan en las fuentes literarias las cuestiones acerca de los estados. Desaparecen los cotilleos de los particulares.
… las respuestas se basaban directamente en la inspiración divina de la Ptia de Delfos. En sus mejores tiempos, los sacerdotes llegaron a tener a tres mujeres contratadas (dos titulares y otra suplente) para que no se acumulara el trabajo. Previo pago de un impuesto, ofrendas de frutos y el sacrificio favorable de una cabra, los fieles podían penetrar en el santuario. En el ritual existían tres elementos externos que ayudaban: la falla que expulsaba el pneuma (gas con efectos alucinógenos que todavía no se ha encontrado), la fuente Castalia y el laurel sagrado… y tres elementos internos: la estatua del dios Apolo, la piedra ombligo del mundo y el trípode al que se subía la Pitia...
 
En Delfos, además de Apolo se veneraba a la triada Apolínea (Apolo, su madre Leto y su hermana Artemis). Cuando Apolo pasaba sus vacaciones de invierno en Hiperbórea, el dios a cargo del Santuario era Dioniso. Fuera del Templo, en la terraza de Marmaria se encontraban los templos de Atenea Pronaia y de Ártemis.
Templo de Atenea Pronaia

A principios del s. VI AC  el Oráculo de Delfos se había convertido en el centro de peregrinación más importante de la Ecúmene, superando al de Dodona gracias a su localización en la Grecia Central. Piadosos griegos y bárbaros sacudían a oír sus predicciones y a cambio entregaban valiosas ofrendas. El rey Creso de Lidia (595-546) donó un león de oro, un trípode, un cuenco de oro. Las presentación del rey Creso al oráculo la realizó el desterrado Alcmeón, de la familia de los Alcmeónidas y su recompensa significó el origen de la riqueza de esta familia (que siempre estaría muy agradecida al santuario). El negocio iba tan bien que el oráculo abrió una franquicia Claros, Efeso, para Asia Menor.

Los Alcmeónidas descienden de un tataranieto del anciano Nestor de la guerra de Troya, el rey de Pilos. Nestor era hijo de aquella Melibea llamada Cloris única superviviente de la venganza de Apolo y Artemis contra los Niobidas. Los Alcmeonidas huyeron de Pilos tras la invasión Dorida Heraclida del Peloponeso. Establecidos en Atenas dieron dos Arcontes  vitalicios, Megacles (el sexto) y Alcmeon (el último). En 632, otro Megacles, el primer Arconte epónimo de la familia fue responsable de la muerte del tirano Cilon y sus seguidores refugiados en el templo de Erecteo. Por este motivo, los Alcmeónidas fueron desterrados, aunque vuelven durante el arcontado de Solon (594). Alcmeón, hijo de Megacles invirtió el dinero de Creso en caballos que le dieron la victoria en los juegos de Olimpia de 592 y fue readmitido en Atenas. Un cretense mentiroso llamado Epimedes absolvió a la ciudad y al pueblo de Atenas de su pecado.


La riqueza de Delfos provocó la codicia de los de Cirra, el puerto por el cual accedían los peregrinos al valle de Delfos. Los gobernantes de Cirra impusieron a los oferentes un peaje por atravesar su territorio. Por este motivo, reunida la Afictionía de Delfos y Antela, se declaró la guerra a Cirra. La Primera Guerra Sagrada duró unos 10 años (595-585).


La Anfictionía era una coalición de 12 tribus griegas (13) de Beocia, Jonia y el Peloponeso que se reunían por motivos religiosos en torno a los santuarios de Apolo en Delfos y de Demeter en las Termópilas, dos veces al año.

Delfos en el centro de la Helade



Cada una de las tribus solía enviar uno o dos representantes: Beocia, Fócida, Jonia (1 representante de Atenas), Magnesia, Tesalia (propiamente), Aqueos de Ftiotide, Dorios (1 Doride y 1 de Esparta), Oeteos, Aenianos, Malios, Lócrida, Perrebios (con 1 representante) y Dolopes (con 1 representante).


La guerra contra Cirra fue dirigida por Clístenes, el tirano de Sición, y por Alcmeon de Atenas. Clistenes emparentó con los Alcmeónidas cuando su hija Agarista I se casó con Megacles II (o III si contamos al arconte vitalicio) hijo de Alcmeon. Anteriormente estaba casado con una hija del tirano Pisistrato, pero no les fue bien y los Alcmeonidas fueron expulsados por segunda vez, brevemente. Megacles y Agarista fueron los padres de Clístenes, el legislador de Atenas.

Como resultado de la guerra, la ciudad de Cirra fue destruida y sus campos consagrados al dios ya no se podrían cultivar. Clístenes de Sicion celebró los primeros Juegos Píticos, que tenían una periodicidad de 4 años, como en Olimpia.


En el año 548 el antiguo templo de Trofonio y Agamedes se incendió. Se construyó otro, sufragado por la familia de los Alcmeónidas de Atenas, empleando grandes medios, que fue terminado hacia 510-505. El Segundo Templo o Templo de los Alcmeónidas era sin duda un edificio espléndido.


Durante las invasiones persas de Guerras Médicas (492-490 y 480-479) el oráculo fue acusado de filo persa por su consejo de “no resistir al invasor”. Sin embargo, continuó enriqueciéndose pues recibió diezmos tras las batallas de Salamina (480) y de Platea (479). Atenas donó un tesoro (capilla) tras la batalla de Maraton (480), un pórtico tras Mícala y una palmera con dátiles de oro tras la batalla de Eurimedonte (468). Gelon de Siracusa, un trípode de oro con una Nike tras Himera (480). El príncipe siciliano Polizalos de Gela, tras su victoria en los Juegos Píticos, una horrorosa escultura de un auriga. 
El Auriga de Delfos, sin el carro

Terminadas las Guerras Médicas, comienza el período de la Pentecontecia. Grecia estaba dividida en dos bloques liderados por las potencias vencedoras de Esparta y Atenas, la Liga del Peloponeso y la Liga de Delos, con regímenes políticos completamente distintos… Esparta apoyó la independencia de Delfos del resto de Fócide. En represalia, los foceos, aliados de Atenas, se adueñaron del santuario en 448 AC. Esta fue la causa de la Segunda Guerra Sagrada (449-448), un capítulo de la Primera Guerra del Peloponeso (460-445).


La fuerza expedicionaria ateniense que recuperó Delfos para la Fócide estaba comandada por el Alcmeónida Pericles, sobrino de Clístenes. Solamente en 421, con la Paz de Nicias, en el intermedio de la (segunda) Guerra del Peloponeso (431-404), Delfos pudo recuperar su independencia. 

El famoso busto de Pericles, hijo de Jantipo ateniense, por Calicres



Estas guerras apenas tuvieron consecuencias para el santuario y la afluencia de peregrinos no se detuvo. En 373 un terremoto provocó una avalancha de rocas de los montes Fedríades que destruyó parte del templo. La reconstrucción no terminó hasta 366.


En 356, los de Focide reclamaron la restauración de sus derechos soberanos sobre Delfos, lo cual acabó desencadenando la Tercera Guerra Sagrada (356-346). La Liga Beocia empezó obligando a las naciones unidas de la Anfictionia a condenar a Focide por no respetar sus juramentos de mandar un contingente a la Segunda Batalla de Mantinea (362). Como resultado, Tebas derrota a Esparta y sus aliados, pero muere el líder Epaminondas, lo que supone el principio del fin de la Hegemonia Tebana (desde Leuctra en 371). Como represalia, los Focidios ocupan Delfos y los terrenos de Cirra, que estaban consagrados al dios desde los tiempos de la Primera Guerra Sagrada. Los Focidios reclamaban esa tierra porque Cirra era una ciudad de la Focide y Delfos en los tiempos antiguos, también. Homero, en el Catálogo de Naves, los mete a todos juntos en el mismo barco: “Al frente de los Focidios iban Esquedio y Epistrofo, hijos del magnánimo Ifito Naubólida, que poseían Cipariso y la pedregosa Piton (Delfos)” (Il. II, 517-519).
Filomelo, líder de Focide, ocupó Delfos y se atrincheró allí. Los Focidios se hicieron dueños del santuario durante 10 años. Aunque Filomelo derrotó a Beocios y Locrios en las Termópilas (355), al final fue derrotado por las fuerzas conjuntas de Beocia y Tesalia. En 355 se suicidó.


El sucesor de Filomelo fue Onomarco, brillante general y político, que anteriormente había rechazado el sitio del Pelópidas y el Batallón Sagrado durante el sitio de Elateia (capital de Focide) en 371. Para ello había utilizado como escudos humanos a viejos, mujeres y niños.
Focide era aliada tradicional de Atenas, desde los tiempos de la Segunda Guerra Sagrada. Onomarco tuvo la habilidad de firmar un pacto militar con Tesalia en Feres. Los Beocios pidieron ayuda a una potencia rival de Tesalia, Macedonia, que estaba llevando a cabo una política expansionista bajo el liderazgo de su ambicioso rey Filipo II.

¿FIlipo II?


Onomarco expolió los bienes del santuario de Delfos para pagar tropas mercenarias y sobornó a algunos estados tesalios para abandonar su alianza con Tebas. Invadió Locrida, tomó su capital, Amfisa y destruyó la Tetrópolis de Doride. Penetró en Beocia y puso asedio a Orcómeno y Queronea, viéndose obligado a retirarse. Tras este asedio, recibió la petición de ayuda de Licofron II de Feres, que estaba siendo atacado por Macedonia, que apoyaba a un rival en el trono. Onomarco atacó a Filipo, lo venció en dos batallas, y lo expulsó de Tesalia. Filipo dijo que sólo era una retirada estratégica...


En 352, focidios y atenienses fueron derrotados en la Batalla del Campo de Azafrán por Filipo II. Onomarco intentó llegar a nado hasta la flota ateniense de su aliado Cares, pero murió ahogado o por las heridas del fuego amigo de sus propios dardos. Filipo II recogió el cadáver de su enemigo y lo crucificó como castigo por el sacrilegio cometido en Delfos.


En 352 pudieron reemprenderse los trabajos del templo, aunque la guerra continuó hasta 346. Onomarco tenía un hermano llamado Failo (Phailus) que asumió la dirección de la guerra con los restos del ejército focidio. Failo también malversó los tesoros del templo, pero no para los gastos de la guerra, sino para sacar provecho propio.


Según Partenio (Erótica Parteniana XXV), el tirano Failo se enamoró de la señora de uno de sus aliados, Aristón, líder de los Oetanos, las tribus salvajes que vivían en el monte Eta (no es el mismo rey de Esparta y padre del traidor Demarato). "El tirano de Focide envió mensajeros a la mujer, con la promesa de mucha plata y oro y añadió que cualquier cosa que pudiera desear no debería dejar de pedírsela. Pues no tuvo otro anhelo que el collar suspendido del templo de Atenea Pronaos, que algún tiempo atrás había pertenecido a Erífile y causado la perdición de Tebas... Failo el enamorado llevó un gran botín con las ofrendas de Delfos y el famoso collar a casa de Ariston. Durante algún tiempo, la mujer fue adorada como una diosa, pero al final tuvo un destino sospechosamente parecido al de Erífile. Su hijo enloqueció como Alcmeon, prendió fuego a su casa y en el incendio, la mujer y parte de sus pertenencias fueron pasto de las llamas".


Fócide terminó sus días de gloria en la historia de la Anfictionía. Expulsados por Filipo, los foceos fueron obligados a pagar una cuantiosa indemnización y perdieron sus votos en la Anfictionía en favor de Macedonia. Filipo hizo restaurar los tesoros perdidos a Delfos.


La Cuarta Guerra Sagrada comenzó en 339 AC a causa de los enfrentamientos de Macedonia y Atenas por el control de la Anfictionía. Los Locrios Ozolios de la ciudad de Amfisa acusaron ante la Anfictionía a los atenienses de sacrilegio porque durante la Tercera Guerra habían colgado dos escudos dorados en el templo de Apolo con una inscripción “los atenienses como botín de medos y tebanos cuando luchaban juntos contra los griegos”. Esto era un crimen religioso como el santuario aún no estaba restaurado y no había sido consagrado (se encontraban todavía en guerra) no estaba permitido exponer ninguna donaión y además ofendía a una de los estados de la Anfictionía. Amfisa propuso una multa de 50 talentos.


Atenas acusó a Amfisa de cultivar la llanura prohibida de Cirra...
En aquellos tiempos existían dos tendencias políticas en Atenas:
  • los amigos de Macedonia, representados por Esquines
  • los enemigos de Macedonia (y amigos de Tebas) de Demóstenes

Demostenes. Barba poco cuidada, mirada baja, ceño funcido...
Esquines y Demóstenes están en la lista de los 10 oradores áticos. Eran tan malos como el inventor de los radares móviles. Esquines consiguió en una reunión de la Anfictionía que se condenara a Amfisa, que era aliada de Tebas. Demóstenes logró que Atenas se ausentara de la reunión posterior donde se decidía si la anfictionía declaraba la guerra a Amfisa. Los de Tebas tampoco acudieron. 
Entonces los tesalios consiguieron que se encargara a Filipo II el castigo de la ciudad de Amfisa.

Filipo y su ejército entra con ganas en Grecia Central. Pacta con Focide y reconstruye la ciudad de Elateia. Luego divide su ejército en dos partes, una se dirige hacia el paso de Gravia para luchar con Amfisa y la otra hacia el paso de Queronea, donde le esperan atenienses y tebanos. Cae Amfisa y Filipo convence a la Anfictionía de Delfos de continuar la guerra contra Tebas.

Esquines. Vista al frente, serio, barba arreglada, peinado con rizo en el centro...



Filipo II, su hijo Alejandro y el general Parmenio entran en Beocia y se enfrentan a un descoordinado ejercito tebano y ateniense en la Batalla de Queronea de 338. Ahora es Demóstenes el que corre para luchar otro día...


Estos incidentes retrasaron la reconstrucción del Santuario de Delfos hasta 338.

Durante la época helenística se construyeron un teatro y un estadio nuevo. La Liga Etolia asumió el control del santuario. Los reyes de Pérgamo fueron los que realizaron los regalos más monumentales.

Celtas, Germanos y Romanos:

De inicios a mediados del siglo IV a.C. las tribus celtas fueron obligadas a migrar por la presión demográfica. Se establecieron en la llanura de Panonia, a orillas del bello Danubio azul, donde vivieron felices, por generaciones.

Al comienzo del III A.C.  comienzan su avance hacia el sureste, buscando mejores pastos y un clima más apacible, llegando al límite norte del mundo griego. Al mando de su líder Cambaules, un grupo llegó a Tracia, pero el reino de Macedonia fue capaz de mantenerlos a raya.

Desde 281, la presión que los galos ejercieron sobre el Reino de Macedonia fue incontenible, para un reino debilitado por largos años de la Guerra de los Diadocos, tras la muerte de Alejandro Magno. Los macedonios se aliaron con la tribu vecina de los Dardanios (curioso nombre), que ofrecieron 20.000 guerreros a la causa, pero el joven y prepotente rey de turno, el Lágida y Antigónida Ptolomeo Cerauno “el rayo”, rechazó la alianza.

Los galos ofrecieron la paz al rey de Macedonia pero éste la rechazó. En el 279, los celtas derrotaron a los macedonios matando a Ptolomeo Cerauno en batalla. El camino hacia Grecia central estaba expedito.

Los celtas estaban divididos en tres grupos:
  • Flanco oriental al mando de Ceretrio, que atacó Tracia y venció a los Getas.
  • Flanco central al mando de Breno atacaron Macedonia y luego aplastaron a los dardanios.
  • Flanco occidental de Bolgios, atacó a los Ilirios y mató al rey Ptolomeo Cerauno.

Surgió un líder de la casa de Antígono llamado Sóstenes que reunió tropas y resistió a los celtas un tiempo. Sóstenes fue nombrado rey, pero tal final fue vencido y muerto. Todo su país fue saqueado menos las ciudades fortificadas que los celtas no pudieron tomar (no sabían sitiar ciudades amuralladas).

Al tener noticias de las grandes riquezas helénicas, un ejército de jinetes al mando de Breno (se llamaba igual que el fulano que atacó Roma el siglo anterior) invadió el Norte de Grecia. Esta campaña tuvo lugar en invierno, con el Parnaso nevado. Estas condiciones climáticas unido al apoyo etolio y de los foceos, salvaron un primer ataque sobre el templo de Delfos.

Los celtas cayeron sobre Tesalia a las órdenes de Breno. Los primeros ataques celtas se producen en el valle del río Esperqueo, haciendo retroceder a los griegos. Los griegos organizaron un ejército al mando de Cefisodoto de Beocia y Poliarco de Etolia. Se hicieron fuertes en las Termópilas, el estrecho paso desde donde se podía defender el acceso a Grecia Central. En un principio fueron contenidos por este pequeño grupo de guerreros... (esto se repite muchas veces...).

Breno, marcando abdominales. Parece Asterix.
Las fuerzas celtas atacaron de frente el paso, siendo retrasados. Luego intentaron flanquear las montañas y fueron rechazados.

Para hacer retroceder a los griegos, Breno mandó un contingente celta a Etolia, donde estaban las bases de aprovisionamiento griegas. Saquearon Callium, al Norte de Delfos, ciudad que arrasaron por completo, mataron a todos los hombres y violaron a todas las mujeres, vivas o muertas, también a algunos varones... 

Breno, herido, se retiró de la lucha. La leyenda asegura que Atenea y Artemisa intervinieron en la batalla, provocando el derrumbamiento de piedras del Parnaso, lanzadas sin duda por los griegos apostados en las alturas, sembraron el pánico entre los gálatas. Antes de retirarse, saquearon los templos de Marmaria, cargando su precioso botín. Colgado del Templo de Atenea estaba el collar maldito...

El Oráculo de Delfos era conocido por los celtas por sus leyendas de estatuas de oro, aunque sólo era un baño de oro por encima del bronce. Breno si lo sabia aunque ocultó este dato a sus tropas para darles moral.

Breno marchó con sus 40.000 galos al Ática, cruzaron las montañas con ayuda de la neblina y guías griegos. Parte de los galos se quedaron en Heraclea con el botín, los locales les dieron sobornos a cambio de no saquear sus ciudades.

Los celtas sufrieron los efectos de la guerra irregular, el acoso de las guerrillas campesinas de los focidios. Los restos del ejército beocio y ateniense que se unieron y salieron en su persecución. Esto no impidió a la horda celta seguir arrasando santuarios, primero el de Zeus de Dodona en Epiro y luego el de Olimpia. En cada ciudad que ocupaban hacían un botellón por lo que se desconoce si Breno, agonizante, murió a lo largo del viaje de vuelta por sus heridas o por el alcohol. 

Sin su líder, la alianza gala se rompió y cada pueblo siguió su destino:
  • La mayoría de la expedición tuvo destinos diferentes una parte volvió a la llanura panónica, en el este de Europa, para mezclarse con Getas y Dacios
  • Los Volcas Tectosagos regresaron a la Galia, por ello se llamaron galos. Estos fueron los que se llevaron el botín de guerra.se establecieron en las nuevas tierras conquistadas.
  • Los Tolistobogii, los Trocmi y parte de los Volcas Tectósages cruzaron el Mar Negro y pasaron a Asia Menor. De su unión con los nativos provocaron el nacimiento de reino de Galacia (el de las Cartas de San Pablo).
Los Tectósages al llegar a Tolosa, intentaron escurrir el dinero a la depredación del fisco. Se cree que fundieron el oro y la plata. La plata la transformaron en gigantescas ruedas de molino. Escondieron el tesoro en diversos lagos sagrados ubicados en el recinto del templo del dios Apolo de Tolosa. Los romanos calcularon que el total ascendía a 15.000 talentos o casi 70 toneladas. El oro sagrado debería de custodiarse en el templo para evitar la ira del dios por la profanación. Aunque se vieran las piedras de oro relucir en el fondo del lago y en las orillas, los habitantes sabían que no deberían tocarlo por miedo a la maldición. Tesoros arrojados a los lagos son la espada de Arturo y el oro del Rin (aunque éste de la tradición germánica).

Sobre los restos del antiguo templo de Apolo se erigió una iglesia cristiana y posteriormente la Basílica de la Dorada de Tolosa, que debe su nombre a los numerosos mosaicos de oro que contenía...

Basílica de Nuestra Señora la Dorada de Tolosa

Hacia el siglo II AC, Roma se encuentra en expansión en la Galia y en Hispania. Un pretor de Hispania Ulterior y después procónsul de la Galia Transalpina, Quinto Servilio Cepion el Viejo, cuyo padre había derrotado a Viriato en la Guerra Lusitana, tuvo noticia del oro de los galos "Aurum Tolosanum habet".
Don Pablo es Quinto Servilio Cepion, AAARGH!
El oro de los tectósagos se convirtió en una leyenda envuelta en un aura maldita debido a su origen sacrílego. Si los galos sabían dónde estaba y podían verlo desde las orillas de los lagos, ¿por qué no lo tomaban?

En el año 105 AC, el procónsul  Quinto Servilio Cepión, comunicó el descubrimiento del oro en Tolosa. Fue encargado de custodiar y de enviar el tesoro al senado. Pero el oro desapareció en el camino. Estrabón menciona que "fue a causa de la imposición de manos sobre ellos que Cepión acabó con su vida en desgracias ..." y luego dice que acabó sus días desterrado en Asia Menor y sus hijas acabaron ejerciendo la prostitución.

Se informó de que el oro fue robado por una banda de merodeadores, que el mismo Cepión les había contratado. Quinto Servilio Cepión, el cual había derrotado un año antes la insurrección de los Volcas por la que fue homenajeado, fue acusado públicamente de sustraer un parte del tesoro de Tolosa simulando un asalto de forajidos a la caravana que transportaba el oro hasta la ciudad de Massalia, desde donde debía embarcar a Roma.
  Cepión fue derrotado en la batalla de Arausio por su arrogancia, y fue procesado por corrupción por el Senado.

La Batalla de Arausio tuvo lugar el en 105, en algún lugar entre el poblado de Arausio, actual Orange (Francia), y el río Ródano. Roma envió a dos ejércitos para interceptar a las tribus migratorias de cimbrios y teutones, dirigidos por Boorix y Teutobod.

Uno de los ejércitos iba al mando de Cepio que era un patricio de antigua estirpe, y Malio era un plebeyo, un "hombre nuevo” sin antepasados. Cepio debía subordinarse a Malio por ser éste el cónsul ese año, pero su orgullo se lo impedía. Cepio montó el campamento en la orilla opuesta del río con tal de no estar bajo su mando, a unos 35 km de distancia. El pique entre los comandantes fue la principal causa del desastre. Las pérdidas romanas se elevaron hasta 80.000 legionarios (en 12 legiones) prácticamente la totalidad de tropas auxiliares (para Mommsen alrededor de 40.000 más). Esta derrota por mal entendimiento de los líderes romanos, recuerda un poco a la batalla de las Horcas Caudinas.

Las migraciones de las tribus de cimbrios y teutones por territorio galo tras la batalla de Noreia alteraron el equilibrio de fuerzas en la zona, absorbiendo a tribus menores e incitando o provocando a otras tribus, como los helvecios, a un conflicto con Roma.

Una emboscada a un pequeño contingente de tropas romanas y una rebelión temporal en Tolosa hizo movilizar al Senado tropas al lugar. 

Tras recuperar Tolosa para la Galia Narbonense, el procónsul Quinto Servilio Cepio adoptó una estrategia defensiva, esperando a ver si los cimbrios iban a irrumpir en territorio romano. Por otro lado, el Senado envió al cónsul Malio Máximo con su ejército a unirse con Cepio a las orillas del Ródano.

Malio envió a su caballería de unos 5.000 jinetes, bajo las órdenes de Marco Aurelio Escauro,  que acampara 55 km al norte, con el doble objetivo de vigilar al enemigo. Los germanos y galos rodearon el campo, penetraron en él y acabaron con la resistencia romana. Escauro fue capturado vivo y llevado ante Boiorix, rey de los cimbrios, a quien de forma arrogante le dijo que diera la vuelta si no quería ver su pueblo vencido y aniquilado por Roma. En respuesta, fue quemado vivo en una jaula de mimbre. Mientras tanto, unos representantes del Senado habían llegado para intentar unir los dos ejércitos. Pero Cepio cruzó el río y acampó a 35 km de Malio, dejando a los germanos entre los dos ejércitos romanos y con el río en medio para que no pudieran ayudarse.

Boiorix, al verse rodeado de dos ejércitos, se replanteó la situación y comenzó unas negociaciones con Malio. Cepio por miedo de que Malio tuviera el éxito y regresara a Roma como un héroe, lanzó precipitadamente un ataque contra el campamento cimbrio. Los cimbrios se revolvieron y primero acabaron con el ejército de Cepio y después arrasaron su campamento. Bien.

Después, los cimbrios, se abalanzaron contra las legiones del cónsul Malio, moralmente tocadas tras presenciar la masacre del ejército Cepio desde la orilla y no poder hacer nada. Malio desplegó sus legiones frente al campamento apoyando su flanco izquierdo en el río, pero no pudo proteger su lado derecho al no tener caballería (se había ido al Cielo con Escauro) que maniobrara para evitar el flanqueo, por lo que su ejército fue superado por la derecha y  atrapado contra el río. Se produce una gran mortandad entre los legionarios por no poder huir a nado debido al  peso de las armaduras los arrastraba hasta el fondo.

El cónsul Malio y el procónsul Cepio sobrevivieron a la masacre. Ambos fueron juzgados en Roma, siendo desposeídos de todos sus honores. Cepio además fue condenado al exilio en Esmirna. La maldición del oro se trasmitió a su hijo, Quinto Servilio Cepión el joven, que luchó contra Roma en la Guerra Social. A duras penas escapó una acusación de "maiestas"  tras disputar con el tribuno Marco Livio Druso, que era su primo, y el Princeps Senatus Marco Emilio Escauro (que muchas veces se confunde con su pariente muerto en Arausio).

Cepión muere en una emboscada ejecutada por el general Quinto Poppaedius Silo. El oro de Tolosa en sí mismo nunca fue encontrado, y se dice que se han pasado todo el camino hasta el último heredero de los Caepiones, Marco Junio Bruto, célebre asesino de César (hijo de Servilia, que era hija de Quinto el joven). Los romanos, después de dominar esta regiones, venden los lagos para el erario público, y muchos de los compradores encuentran en las piedras de molino martillo de plata.

En Tolosa, el templo era sagrado y muy venerado por los habitantes de los alrededores. Los tesoros allí custodiados eran abundantes. Muchas personas los habían visto pero nadie se atrevió a poner las manos sobre ellos.


La reciente cadena de desastres militares (derrotas de Noreia y Arausio) causaron una  alarma social en Roma. Estaban casi sin ejército y con un terrible enemigo al otro lado de los Alpes, como en Cannas. Además, era la opinión que la culpa del fracaso militar la tenía Cepio, por el sacrilegio cometido.

Batalla de Vercelas por Tiepolo

Los cimbrios iniciaron una guerra contra una tribu arverna, y tras ganarla, inexplicablemente se dirigieron a los Pirineos, adentrándose en Hispania, en vez de entrar en Italia y atacar Roma. Llegaron a una zona al Norte y Oeste de Hispania que ya empezaba a ser conocida como Gallaecia... Esto dio tiempo a los romanos a recuperarse. Finalmente, los cimbrios fueron derrotados en 101 AC en la batalla de Vercelas, por Cayo Mario y su amigo Sulla.



sábado, 7 de julio de 2012

El collar maldito I: Edad Mito-heroíca


Existen objetos que portan una maldición: son atraídos poderosamente por la vanidad de las personas y por su culpa los hombres matan y a veces, también mueren. Uno de ellos es un collar... y además griego.

Hace muchos años (¿s.XVI AC?) un príncipe de Canaan, hijo del rey de Tiro, llamado Cadmo, llega a Grecia en busca de su hermana Europa. La pobre había sido secuestrada por el padre de todos los dioses, Zeus, que se la llevó en un “toro volador” o “navegador”. El referido Zeus también pudo haber sido un cretense enamorado (pues en realidad su travesía acaba en Creta).

Mosaico romano: Europa raptada por el toro de Zeus
En su viaje de búsqueda desde Fenicia a Grecia, Cadmo civiliza los pueblos atrasados que encuentra y les enseña importantes avances de la civilización como el alfabeto, la agricultura y el trabajo en bronce. Se trata de uno de esos Príncipes extranjeros como Danao el egipcio, Pelope el lidio o Cecrope el "de la tierra" que abrieron nuevos caminos a la cultura y diversificaron la economía de los primeros europeos desde las regiones más avanzadas de Egipto, Asia Menor y Oriente Próximo...

Buscando pistas del paradero de su hermana, Cadmo decide consultar al famoso Oráculo de Delfos, que le ordena asentarse donde se acueste una vaca con una luna dibujada en la frente (tal vez Cadmo no entendió bien el mensaje o el Oráculo la pregunta...).

Al salir del templo de Apolo, ve una vaca y comienza a seguirla. La vaca pasea desde la Fócide hasta Beocia y se sienta delante de la cueva de un feroz dragón (o serpiente, tal vez) llamado Ismeno, que custodia la fuente llamada Ismene o Aeonia (posteriormente llamada fuente de Dirce, excepto para Higinio que la confunde con Castalia). En los ritos fundacionales de las ciudades se necesita agua y también hay que purificarse para el sacrificio de la vaca a Atenea (con el que Cadmo inaugura el culto a Palas Onka). Pero la serpiente no les deja acceder al agua y devora a unos cuantos tirios (los detalles en las Metamorfosis de Ovidio). Cadmo mata a la bicha, ganándose el rencor del dios Ares, dueño o padre de la criatura. Sobre la sangre del dragón (¡Uf!) construye una ciudad (Cadmea, luego Tebas). Y el agua la consigue en la cueva Coreirea.


Cadmo arreándole una pedrada a Ismeno, en presencia de Harmonia y Atenea
Cadmo planta unos pocos dientes del dragón en la tierra por inspiración de la diosa Atenea (rival de Ares) como si fueran semillas. Así surge de la tierra la raza de los Espartos (sembrados), guerreros indómitos y de muy mala leche que comienzan a pelear entre ellos hasta que sólo sobreviven cinco o seis. Espartoi titulares: Equion “hombre serpiente”, Udeo “hombre del suelo”, Ctonio “de la tierra”, Peloro “monstruoso”, Hiperenor “altivo” y suplente Ástaco “langosta”,que serán las cabezas de las casas nobles de Tebas.

Cadmo es juzgado por los dioses y castigado por el crimen cometido a servir durante un año en casa de Ares. Los años de los dioses duran al menos ocho años normales. En el tiempo que pasa sembrando los campos, alimentando el ganado de Ares, limpiando la casa, lavando la ropa, preparando la comida y llenando la copa del dios, conoce a la familia de su patrón. De esta manera, empieza a salir con la joven Harmonía, hija de Ares y de Afrodita.

Los Espartos de la peli de Jason y los Argonautas. Para ser coherentes con la historia, Atenea regaló algunos dientes sobrantes a Eetes, rey de la Cólquida

Harmonía, haciendo honor a su nombre, reconcilia Cadmo con su padre, evitándole un mayor castigo. Cadmo y Harmonía deciden casarse, conque se abandona definitiva mente la búsqueda de Europa. A la boda acuden todos los dioses, o casi todos. El regalo principal es un collar y un peplo a juego, realizados por Hefesto (¿además de golpear el yunque, también cosía?). Sobre estos objetos pesa la famosa maldición.

Motivos para una maldición:
  •  Harmonía es hija de los amores adúlteros de Ares y Afrodita. Hefesto es el marido cornudo de Afrodita. Un tema constante en toda la mitología clásica es la divinidad agraviada y vengativa. Velo y collar están fabricados con el mismo material que la cadena que aprisionó a Ares a la cama de Hefesto, cuando se acostó con Afrodita, de cuya unión nace Harmonía. Detalle recogido en la fábula 148 de Higino.
  • La maldición es responsabilidad de Europa, que lo consigue de su amante Zeus. Cuando se entera de que su hermano deja de buscarla, se siente muy ofendida. Y Zeus, a través del regalo de Hefesto, castiga a Cadmo.

El tesoro pertenece durante generaciones a la casa real de Tebas. Va a traer desgracias a todas sus propietarias. La primera fue Harmonía. Curiosamente a la primera propietaria del collar, no le fueron tan mal las cosas, la maldición cae directamente sobre sus hijas (recuerda un poco al libro del Génesis: la maldición de Noe no cae sobre Cam sino sobre su hijo Canaan). Cuando Cadmo es obligado a abandonar Tebas (presumiblemente a causa de un golpe de estado de su nieto Penteo), Harmonía le acompaña. Cuando llegan al país de los Enqueleos, les ayudan en su guerra contra los Ilirios. Después él y Harmonía fueron transformados en dragones y enviados al Eliseo, o según otras fuentes fueron llevados allí en un carro tirado por dragones. Pero el collar se lo dejaron en casa.

Sémele, hija de Cadmo, es una amante que recibe a Zeus secretamente en sus habitaciones. La celosa esposa de Zeus, Hera, toma la forma de la vieja Béroe, nodriza de Sémele. Intenta convencerla de que su amante no era Zeus, sino un hombre normal y corriente (y además cretense). Entonces, Sémele pide a Zeus que le demuestre su poder, y éste, porque Sémele ya estaba embarazada, jura por la Estigia (los dioses juran por Estigia y los héroes por el Orco) concederle cuanto le pida. Engañada por Hera, le pide que se le aparezca con todo su esplendor, con el fulgor radiactivo de su carro y lanzando rayos, de esta forma no cabe duda de que se trata de dios. Esto provoca la muerte de Sémele por exposición, aunque su hijo si se salva y llega a hacer carrera en el Olimpo: se trata de Dioniso. Sémele en estado de coma irreversible, es intervenida de una cesárea de emergencia por Hefesto, con su hacha, y el niño injertado en el “muslo” de Zeus como si fuera una incubadora.

Después se produce un periodo de anarquía en Tebas con la muerte desgraciada de varios sucesores de Cadmo. El trono corresponde al hijo mayor, Polidoro, pero éste o bien acompaña a sus padres al destierro o bien es expulsado por su sobrino, Penteo, hijo de Ágave, la hermana de Sémele.

Agave esta casada con el esparto Equion quien regenta el reino en ausencia de Cadmo. En calidad de reina de Tebas es la siguiente propietaria del collar. Se dedica a difundir noticias falsas sobre la muerte de su hermana Sémele. También influye en su hijo el rey Penteo que prohíbe el nuevo culto que  predica Dionisio, el hijo de Sémele, quien además de hijo de Dios y profeta era visto con un rival advenedizo al trono.

Dionisio consigue que sus tías Agave, Ino y Autonoe participen en una bacanal que esta organizando en el monte Citerion. Penteo acude a detenerlo. En el frenesí alcohólico, las bacantes despedazan al rey Penteo y Agave le corta la cabeza a su hijo, que confunde con un cervatillo. Las drogas no son buenas, como dijo Eurípides.

Muerte de Penteo en figuras rojas
Con Polidoro fuera de juego, el trono debe corresponder a su hijo Lábdaco (“el cojo”), que todavía es muy joven. Por este motivo, asumen la regencia de Tebas los hermanos Lico y Nicteo, hijos del esparto Ctonio (presumiblemente). Polidoro estaba casado con Nycteis, hija de Ctonio, por tanto Lico y Nicteo asumieron el reino en nombre de su cuñado. Esta pareja de hermanos había hecho amistad con el rey Penteo después de asesinar a Flegias, rey del Orcómeno de Beocia (Flegias en Hades detenta un negocio de transporte de viajeros a través de la Estigia, de la misma manera que Caronte tiene la franquicia sobre el Aqueronte).

En Tebas reina Nicteo, que tiene una hija llamada Antíope, de belleza extraordinaria y pretendida por numerosos príncipes y reyes de Grecia. Muy guapa pero con estrabismo convergente (¿anti ops?) como se observa en algunas obras de arte.


Zeus sátiro y Antiope en un mosaico romano
Zeus (presuntamente) es el amante que deja embarazada a Antiope, disfrazado de sátiro. Antíope debe huir de la cólera de su padre, quien no se creía que el noviete de su hija fuera el rey de los dioses y la acusaba de blasfemia (quizá pensara que se trataba de un astuto cretense). Aconsejada por el mismo Zeus disfrazado de lechuza, la muchacha se refugia en Sición, llamada Fegeide en aquellos tiempos, en la corte de Epopeo (advenedizo malvado que mandaba en Fegeide en aquellos tiempos).

Nicteo la persigue con su ejército hasta la corte de Epopeo I, donde se había exiliado Antíope, hecho que éste considera como alta traición. Antíope se casa con Epopeo, que esperaba ocupar el trono de Tebas. En la guerra entre las dos ciudades Nicteo resultó herido, pero antes de morir encarga a su hermano Lico que castigue a su hija.

Lico asume el trono de Tebas, como regente de Lábdaco. Lico consigue matar a Epopeo I y lleva de vuelta a Antiope a Tebas. Durante la guerra, Lábdaco llega a su mayoría de edad y obtiene brevemente el reino, pero muere luchando con el rey de Atenas, Pandión I, que lucha para poner a su candidato llamado Sicion “el ateniense” en el trono de Epopeo (el general Sición tenía ciertos derechos al trono por parte de su esposa) y que contaba con el apoyo del rey de Tracia Tereo. Layo (“trenco”), hijo de Lábdaco (“cojo”), es muy joven para reinar, por lo que Lico vuelve a asumir el poder. En el camino de regreso a Tebas, Antíope da a luz los dos gemelos que había tenido de Zeus, Zeto y Anfion, los Dioscuros tebanos. Los niños de Zeus son abandonados y recogidos por una familia de pastores del monte Citerion.

Dirce la esposa del rey Lico, era una presumida y vanidosa que le gustaba mirarse a un espejo mágico con el collar de la desgracia puesto. Envidia la belleza de su sobrina Antíope y la maltrataba tirándole del pelo, arañándole la cara e incluso llegó a atarla de los cuernos de un toro. Además Lico se siente atraído por la belleza de su sobrina. La malvada Dirce, carcomida por los celos, la encierra en una celda oscura sin agua para beber. Pero la cautiva logra escaparse, huyendo al monte, donde vivían sus hijos. Éstos, juran vengar a su madre y atacan Tebas. Consiguen destronar a Lico y atan a Dirce a un toro que la arrastra hasta matarla. En su lugar de martirio existe una fuente famosa.

Dirce en un fresco de Pompeya. Lleva un collar, que parece de oro...
 Dionisio, en venganza por la muerte de Dirce, que era su sacerdotisa, enloquece a Antíope, quien vaga por Grecia sola y abandonada en un estado lamentable hasta que conoce al príncipe Foco, nieto de Sísifo que se casa con ella. Cuando muere, Antíope es enterrada en la misma tumba que su esposo (es una de las ánimas que se aparece a Ulises cuando visita el Hades).

La vida de Antíope está calcada en otras mujeres de la mitología (Calisto, Auge, Danae, Ío, Antiope), todas madres de héroes. “La tragedia de la joven” (de Walter Burkert) tiene un esquema muy cercano al de un cuento popular:
- jovencita seducida (o violada) por un dios disfrazado (de toro, sátiro, lluvia dorada, de mujer...)
- tribulaciones (maltrato, vagabundeo, separación de su familia) y nacimiento del hérioe
- salvación y reconocimiento, por su nuevo marido o por su hijo...

El trono de Tebas lo comparten los hermanos Zeto (casado con Aedon) y Anfion (casado con Niobe) que reinan en Tebas desplazando al legítimo heredero, Layo, que es expulsado. El rey Pélope de Pisa, en Elide, en el Oeste del Peloponeso, le concede asilo político. Al principio, el reinado de los gemelos augura prosperidad. Zeto es un músico, a cargo del ministerio de cultura y de fomento, que con su lira es capaz de levantar bloques de piedra y construir las murallas de la ciudad. Anfion es un guerrero y un cazador que se encarga del ministerio de agricultura y ganadería y también del ejército. A lo mejor las competencias las asumen al revés. A sus esposas les gustan los collares...

Aedon, reina consorte de Tebas por su matrimonio con Zeto, e hija de Pandareo de Éfeso, comienza a pasearse con un extraño collar. La reina es la mujer más hermosa y la más rica de Tebas. Sólo una mujer le hace sombra: su concuñada Niobe.

Aedon sólo tiene un hijo llamado Itilo, pero Anfion y Niobe tienen seis. Loca por los celos, decide matar al primogénito de su rival. Parece que los dos chavales dormían juntos en la misma habitación, uno a cada lado de la cama. Por la noche, aprovechando la oscuridad, Aedon clava el bronce con saña en un bulto. Por la mañana, descubre que ha asesinado a su propio hijo, pues los niños cambiaron su lugar al acostarse. El tema de la confusión por la oscuridad, también es típico del cuento (Pulgarcito), de la mitología (Trofonio) y de la historia de Herodoto (Rampsinito). Los dioses la convierten en un ruiseñor, ave que llora por la noche la muerte de su hijo.

Niobe era una hija de Tántalo y Taigete, por tanto una Atlántide. Tuvo entre 12 y 20 hijos, de los que estaba orgullosa sobremanera. Níobe se vanagloriaba de su prole, mofándose de Leto, madre de Apolo y Artemisa, porque ésta sólo había tenido dos hijos. Además estos dioses sólo descendían de Zeus por parte paterna, mientras que los Niobidas (es un metronímico) descendían de Zeus por parte de madre (desde el abuelo materno Tántalo) y de padre (Anfión). Corrompida por su vanidad y con un extraño amuleto colgado del cuello, prohíbe el culto a Leto, pues se considera más digna de ser adorada en los altares. Comete el pecado de Hibrys, la soberbia que le lleva a despreciar a los dioses. Muy enfadado Apolo mata a flechazos a todos sus hijos varones y Artemisa masacra a las chicas, con la única excepción de Melibea, quien tras ver el asesinato de sus hermanos, se pone tan pálida que la llaman Cloris. Esta Cloris será reina de Pilos por su matrimonio con Neleo y madre del anciano Néstor. De esta rama genealógica parte la familia de los Alcmeónidas de Atenas...

Niobe al ver los cadáveres de sus hijos sintió tal dolor que, deshecha en un mar de lágrimas, queda inmóvil. Zeus la convierte en piedra y la transporta hasta el monte Sípilo en su Lidia natal, donde se podía ver cómo las lágrimas brotaban de una placa de mármol con forma de mujer.

Matanza de niobidas (presumiblemente)
Anfión quiere vengar la muerte de sus hijos e invade el santuario de Apolo en Delfos. Apolo lo mata, y después es castigado en el Tártaro.

Mientras en Tebas reinaban los Dioscuros tebanos, el legítimo heredero de Cadmo, Layo, se ganaba otra maldición en el exilio por méritos propios. Su benefactor, el rey Pélope, le confía a su hijo Crisipo para que le enseñe a montar caballos. Layo se enamora del joven. Durante unos Juegos Nemeos lo rapta. En la cronología aceptada estos juegos comienzan hacia el VI AC. En la mitología existen otros dos orígenes: 1) conmemoran la muerte de Ofeltes en tiempos de la Guerra de Tebas o en 2) fundados por Hércules tras la muerte del León de Nemea... En ese tiempo, Apolo mata a Anfión. Layo regresa para ser rey de Tebas y se lleva con él a Crisipo.

Cuando Pélope se presenta ante Layo, Crisipo se suicida por la vergüenza infligida, aunque también es posible que lo asesinara su malvada madrastra Hipodamia de Pisa o sus malvados hermanastros Atreo y Tiestes. Sin embargo, Pélope arroja sobre Layo la maldición de Apolo, por la cual amenaza que su estirpe se exterminará a sí misma. Por el crimen de Layo, Tebas también es castigada con la maldición de la Esfinge.

Layo toma como esposa a otra descendiente del linaje de Cadmo, Yocasta, hija de Meneceo y nieta de Penteo (pues el abuelo de Layo y la bisabuela de Yocasta eran hermanos: Polidoro y Agave, ambos hijos de Cadmo y de Harmonia).

Yocasta es la siguiente desgraciada propietaria del collar maldito. Durante años Layo y Yocasta intentan tener hijos, sin conseguirlo. Layo acude al Oráculo de Delfos pidiendo una solución. La respuesta del oráculo no le gusta nada: «Tu hijo matará a su padre y se acostará con su madre». Layo, prudente, guarda el secreto y no lo revela a su mujer, pero evita tener con ella relaciones sexuales. Una noche, bajo los efectos de la bebida se acuesta con su mujer, y engendra a Edipo (pies edematosos). El alcohol es malo, ya lo dijo Sófocles.

Los descendientes masculinos de los Labdácidas tienen algún problema congénito y hereditario para caminar (y si no lo tienen, lo inventan). Con el objeto de que no se cumpliera la profecía, Layo abandona a Edipo para que muriera, con los talones atravesados por un hilo (estos reyes siempre abandonan al niño en una situación imposible pero nunca se quedan para confirmar su defunción). Edipo es encontrado abandonado por los reyes Pólibo y Peribea (en algunos textos lleva el nombre de Mérope) de Corinto, quienes lo adoptan. Peribea hace pasar al niño como hijo propio y el defecto en los pies le ayuda a evitar suspicacias.

Años más tarde, Layo, cuando se dirige a Delfos en un carro para cómo acabar con la plaga de la Esfinge (o puede que para preguntar el destino de su hijo abandonado), se cruza con Edipo que iba o venía andando del mismo santuario para preguntar por su origen. El conductor le exige de mala manera a Edipo que se quite de en medio, a lo que éste se niega. En la pelea, Layo sale del carruaje y su hijo le da muerte. Edipo no puede regresar a Corinto, pues el oráculo le ha profetizado que está destinado a matar a su padre y casarse con su madre (sigue pensando que es hijo de los reyes de Corinto). En la mitología tanto de forma condicional como imperativa, Delfos es infalible. Por ello se dirige a Beocia y no a Corinto. A menudo, los medios desencadenados para evitar el oráculo conducen inevitablemente al destino profetizado.

En Tebas reina Creonte, hermano de Yocasta. La Esfinge es una bestezuela que habita en uno de los montes del oeste de la ciudad de Tebas, el Ficio o el Antedón. Desde ahí se dedica a asolar la campiña tebana destruyendo las siembras y matando a todos los que no fueran capaces de resolver sus enigmas. Mataba estrangulando, y algunas opiniones refieren que de ahí viene su nombre, ya que cerraba (esfinter, ‘cerrar’) el paso del aire a los desafortunados que caían en sus garras. La Esfinge propone a Creonte, que si alguien fuese capaz de resolver uno de sus enigmas se iría para siempre. En caso contrario, mataría a quienes fallasen y seguiría destruyendo.

Esfinge (sorprendida en un momento de apuro). Las esfinges griegas son chicas, las egipcias son chicos
Creonte publica un edicto en el BOE: al héroe que resolviera el acertijo, promete la mano (y el resto) de Yocasta y se convertiría en rey de Tebas. A pesar de la edad, Yocasta se mantenía joven y bella debido al poder del collar maldito. El acertijo, habría sido: “¿Qué ser provisto de voz es de cuatro patas, de dos y de tres?” Al preguntarle esto a un cojo, esta claro que lo va a saber. La respuesta es el ser humano, en aquellos casos que gatean cuando es pequeño, camina sobre dos piernas comúnmente y sobre tres cuando utiliza un bastón. Después de que Edipo derrota a la Esfinge que asola Tebas, la reina viuda Yocasta se casa con él. Tienen varios hijos (que son a la vez, hermanos de su padre y nietos de su madre, cosa que lamentarán): dos chicos, Eteocles y Polinices y dos chicas, Ismene y Antígona (algunos autores le quitan la gracia a la historia y creen que los hijos de Edipo proceden de un matrimonio posterior de Edipo, con Eurigania).

Se realiza una investigación para aclarar la muerte de Layo, en el transcurso de la cual se descubre que su asesino fue Edipo. Curiosamente, el mismo criado de los reyes de Corinto que recogió a Edipo cuando fue abandonado en el bosque, es también testigo del asesinato de Layo. Cuando Yocasta descubre que su marido es en realidad su hijo, se suicida (para  Euripides, su muerte tiene lugar después de que los hermanos Eteocles y Polinices se “suiciden” el uno al otro, a causa del trono de Tebas, durante la Guerra de los Siete).

Con Edipo ciego y exiliado en los alrededores de Atenas, los dos hermanos se reparten el trono. Eteocles expulsa a su hermano Polinices de Tebas y se refugia en Argos. En su huida, se lleva el collar funesto y el oro de las arcas de Tebas (esto lo dice Helánico de Lesbos). Polinices llega a Argos al mismo tiempo que otro príncipe exiliado de Etolia llamado Tideo. Los dos vagabundos se ponen a discutir por un lugar donde pasar la noche, hasta que son detenidos por la policía. El rey Adrasto de Argos, había recibido un oráculo que decía que tenía que casar a sus hijas con un león y un jabalí, así que tras enterarse de la disputa, interpretó que Tideo y Polinices eran el león y el jabalí (debido a que llevaban esos animales grabados en sus escudos o bien según otras fuentes a que la disputa había sido por la posesión de dos pieles de estos animales). Así que Adrasto casa a sus hijas con ellos: Deipile con Tideo y Argía con Polinices. Promete a Tideo luchar para restaurarle en el trono de Calidón en Etolia, pero antes debía prestar su ayuda para que Polinices recuperara el trono de Tebas.

En aquellos tiempos, el reino de Argos estaba dividido en cuatro territorios, al frente de los cuales se encuentra un tetrarca. El reino Norte con capital en Micenas era administrado por los descendientes de Perseo (y a la muerte de Euristeo, por los Tantálidas, Atreo y Tiestes). El reino Sur estaba dividido en tres estados, de los cuales el más poderoso es el reino Biántida de Adrasto, quien además es rey de Sicion - que hereda por vía materna tras la muerte de Sición y de su nieto Pólibo - , y también reina en parte de Beocia. Su cuñado y aliado es Anfiarao, tetrarca Melámpida. La cuarta tetrarquía es la Prétida cuyo rey Eteoclo a veces es uno de los Siete aunque suplente y su cuñado Capaneo siempre es uno de los titulares.


Erífile y Polinices (nótese que el collar es de piedras)
Polinices quiere organizar un ejército con siete generales para atacar cada una de las siete puertas de la ciudad. Pero antes tiene que convencer al cuñado de Adrasto, Anfiarao, que es un famoso adivino, para que le auxilie en la guerra. Para ello se vale de la ayuda de su señora, Erífile, hermana de Anfiarao y esposa de Adrasto. La reina es sobornada por Polinices quien le ofrece el collar de Harmonia a cambio de su ayuda. ¿Por qué quería el collar? Parece ser que el objeto está encantado y otorga la eterna juventud a su portadora (ahora se entiende que Edipo se casara con Yocasta y que ésta le diera hijos...). A veces, a este objeto maldito, también se llama collar de Erífile.

Erífile persuade a su esposo Anfiarao para participar en la guerra de los siete contra Tebas, aunque este sabe que moriría (los melámpidas tienen cierta capacidad congénita de predecir el futuro). Un tratado de paz entre los dos reyes después de una guerra entre Melámpidas y Biántidas daba el poder a Erífile de mediar en cualquier disputa entre hermano y esposo.

Tideo en el Bronce de Riace
La expedición de Los Siete contra Tebas resulta una tragedia, con la muerte de los dos hermanos rivales, Eteocles y Polinices en combate singular y de todos los líderes argivos, excepto Adrasto, que se salva por los pelos gracias a su caballo Arión. Antes de partir, Anfiarao encarga a sus hijos Alcmeón y Anfíloco que venguen su muerte (esto no es exacto, en realidad no muere, lo “traga la tierra”!! debido a su maldad al ofrecer el cerebro del tebano Melanipo al agonizante Tideo, hecho que repugna a los dioses).

En Tebas reina el regente Creonte por tercera vez (la primera fue a la muerte de Layo y la segunda entre el destierro de Edipo y el reinado de Eteocles). En alguna de estas regencias, presumiblemente en la primera, los príncipes vagabundos Anfitrion y Alcmena llegan a Tebas, exiliados de la tetrarquía de Tirinto-Micenas en el reino Norte. Anfitrion es el padre putativo de Hércules, que nace en el exilio.

Anfiarao
Diez o veinte años después, Tersandro, hijo de Polinices, quiere atacar Tebas, donde reina Laodamante, hijo de Eteocles. Para ello necesita contar con Alcmeon, hijo de Anfiarao. Igual que hiciera su padre, Tersandro soborna a Erífile, esta vez con el velo de Harmonía que hace juego con el collar, para que convenza a su hijo para dirigir a la  expedición. Alcmeon cumpliendo su deber, organiza el ejército de los Epígonos contra Tebas, con la ayuda de los hijos de los siete magníficos.

Con menos medios, tienen más suerte y conquistan la ciudad. Tersandro se convierte en rey de una Tebas arrasada. Los archivos en lineal B hallados en Tebas (en "Homero y Troya" de Joachim Latacz) sobre temas religiosos y económicos se detienen bruscamente hacia el 1.200 AC y no hay una Tebas en el Catálogo de naves (parte del Canto II de la Iliada). Sobre la Guerra de Troya ...

Representación etrusca deTideo devorando a Melanipo (duda: las fuentes dicen que Anfiarao le cortó la cabeza)
A su regreso, Alcmeon mata a su madre Erífile y le arranca el collar del cuello. Antes de morir, Erífile maldice a toda la tierra que acoja a un matricida. Y Alcmeon enloquece. Perseguido por las Benévolas (o Erinias) mientras huye por toda Grecia, llega a Psófide, la corte del rey Fegeo, quien le da a su hija en matrimonio.

Arsínoe Alfesibea se casa con Alcmeon cuando éste acude a la corte de su padre buscando protección frente a las Erinias, que lo estaban persiguen por haber matado a su madre Erífile. Se produce una gran sequía en las tierras que acogen al matricida. Se lleva consigo el collar y el velo maldito. Pero las Erinias no dejaban de acosarlo, por lo que Alcmeón, aconsejado por el oráculo de Delfos, acudió al río Aqueloo, donde unas tierras recién formadas por un meandro estaban exentas de la maldición por su matricidio.

Alcmeon llega al reino del río Aqueloo. Libre de la locura, comienza una nueva vida y se casa con la hija de Aqueloo, llamada Calirroe. Pasado algún tiempo Calírroe, que temía por su belleza, pidió a su marido el collar y la túnica de Erífile, que Alcmeón había regalado a Arsíone, negándole el lecho hasta que no se las entregara. Así que Alcmeón volvió a Psófide y convence a la ingenua Arsíone de que le diera el collar y la túnica diciéndole que los iba a entregar al oráculo de Delfos para librarse así de las Erinias. La joven, que ignoraba que su marido se había vuelto a casar, acepta encantada, pensando que así volvería con ella, curado de su locura. Pero el rey Fegeo se entera del engaño y ordena a sus hijos que mataran a Alcmeón cuando éste saliera del palacio.

Arsíone se estaba despidiendo a su marido desde la ventana sin saber nada cuando presencia cómo sus hermanos asesinan a Alcmeón y, sin dejarles dar explicaciones, los maldice con morir violentamente antes de la siguiente luna nueva. Fegeo, que también estaba incluido en la maldición, la encierra en un arca y la regala como esclava al rey de Nemea. Calírroe, arrepentida por lo que había hecho, pide a los dioses que permitieran que sus hijos, que todavía eran unos niños, pudieran vengar la muerte de su padre. Zeus atiende esta súplica e hace que los hijos de Calírroe pasen en una sola noche a la edad adulta, por lo que pueden cumplir el deseo de su madre.

Los Alcmeónidas (Anfotero y Acarmán, no confundir con los atenienses) vencen a los Fegeidas (Pronoo y Agenor). Consagran el collar en el templo de Delfos. Puede tratarse bien del primitivo santuario de Atenea o de la diosa Gea pre micénica, bien del Primer Templo de Apolo, que acaban de construir en aquella época los arquitectos Trofonio y Agamedes de Orcómeno de Beocia.

Delfos
Cuando acaba la Edad Mítica, el collar maldito y posible mente también el peplo, se encuentran custodiados en el templo de Delfos.