martes, 7 de abril de 2009

El Extraño Caso de Omar Ben Hafsún


Omar Ben Hafsún, nació en un pueblo de Ronda o puede que de Júcar llamado "La Torrecilla" (como el pueblo de Almanzor), en una familia de muladíes de origen noble godo, pues uno de sus abuelos se había convertido al Islam. Su padre murió bajo las garras de un oso (como el rey Favila) y tenía dos hermanos, uno se llamaba Ayyub y el otro Ya`far (como el de Aladdin, éste era el nombre árabe de su abuelo). Fue criado por este abuelo.

Un mal día descubrió que un pastor bereber le estaba robando el ganado a su abuelo. Omar se enfrentó a él, matándolo. Entonces, Omar tuvo de esconderse en la sierra del Alto Guadalhorce, refugiándose en las ruinas de un viejo castillo, el inexpugnable Bobastro, capital de su rebelión, donde resistió más de 40 años.


Reunió un ejército de descontentos con el régimen: mozárabes, muladíes e incluso beréberes. Su soldadesca le apodó "El capitán de la gran nariz". Su fama era tan grande que el emir de Córdoba, Muhammad I, le perdonó y lo tomó como guardia personal a su servicio (si no puedes únete). De todas maneras, viendo cómo trataba el apartheid árabe a las otras minorías, volvió a rebelarse y entonces si estableció un auténtico reino, conquistando las fortalezas de Comares y Mijas. El emir Abdallah, hijo de Muhammad, puso cerco a Bobastro, pero había luchas internas en Al-Andalus así que Omar ben Hafsún aprovechó para firmar alianzas con otros rebeldes y tomar Estepa, Osuna y Ecija , incluso sus tropas hacen incursiones cerca de Córdoba. Era un reino bastante grande que no aparece en muchos mapas de la E.S.O., con frontera en Elvira y Jaén en el oeste y por el este hasta cerca de Sevilla, dominando las actuales provincias de Málaga y Granada en su máxima expansión.

Entonces es cuando mete la pata, crea un obispado cristiano en Bobastro, construye una iglesia y se convierte al cristianismo en el año 899 adoptando el nombre de Samuel. A lo mejor creía que los reyes de Asturias le iban a apoyar, pero no fue así. El Reino cristiano de Samuel de Bobastro resistirá durante algunas decenas (un Al-Andalus cristiano de principios del siglo X). Lamentablemente su bautizo le restó partidarios, aunque continuó reinando hasta su muerte en 917. Su hijo Suleyman (o Salomón, mola) luchó contra Abderramán III hasta 928, en que fue derrotado. Su hija, Santa Argentea, fue canonizada por la Iglesia Católica como virgen y mártir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario