A lo largo de la historia cristiana, existieron 3 posturas en la relación de fe y razón:
- la confrontación radical, de Tertuliano
- la racionalización del cristianismo, del averroismo latino
- la de colaboración: la fe busca su comprensión
Según la tradición platónica, el objeto propio y adecuado de nuestro conocimiento son las realidades inmateriales (las ideas) y se accede a su conocimiento por el proceso de ascensión o anamnesis. En cambio, los sistemas neo-platónicos se desarrollan de arriba hacia abajo, partiendo de la Idea Suprema (el Bien).
La teoría del conocimiento aristotélico es el punto de partida de la reflexión de Aquino. El conocimiento parte de los sentidos, de la experiencia y por eso el objeto de nuestro entendimiento son las realidades materiales. El entendimiento es a la vez inmaterial y humano, por eso su objeto debe ser la realidad sin limitaciones. Esto tiene dos consecuencias:
- el conocimiento se construye de abajo hacia arriba, a partir de la realidad sensible
- la idea de Dios es imperfecta y analógica, porque su causa es infinita y por ello inaccesible a la razón.
Por este motivo, nuestro conocimiento acerca de Dios, Hombre y Universo tiene unos límites, como decía San Pablo, hay cosas que siempre vamos a desconocer... La Fe cristiana proporciona noticias más allá de los límites, sobre la naturaleza de Dios y el destino del Hombre.
Existen unos contenidos comunes en la frontera de Fe y Razón. A esta zona de intersección pertenecen las afirmaciones:
- el mundo es creado
- el alma es inmortal
¿Qué sentido tiene la existencia de estos contenidos comunes?
- circunstanciales (este es muy bueno): dice Aquino que muchas personas que no pueden adquirir los conocimientos por la Razón, lo logran por la Fe.
- estructurales: el error de la Razón humana.
La existencia de verdades comunes evidencia la distinción entre las dos fuentes de conocimiento. Esto permite distinguir la Filosofía, que toma sus contenidos de la Razón, de la Teología (de la Fe). La diferencia está en la forma de acceso.
Aunque son autónomas, la Razón auxilia a la Fe en la Teología; por ejemplo
- dándole procedimientos de ordenación científica, como un sistema de proposiciones
- armas dialécticas, por ejemplo para explica que el mundo es creado y eterno
- datos científicos
Sin embargo, la Fe es un criterio extrínseco y negativo para la Razón. Extrínseco porque son fuentes de conocimiento distintas. Negativo porque no puede apoyarse la Razón en la Fe para extraer una verdad. Esto que decía Santo Tomás de Aquino, supone un rechazo a todos los integrismos, pero no siempre fue bien comprendido.
¿La anamnesis no es lo que hace imposible olvidar?
ResponderEliminarAh, prefiero coincidir con Santo Tomás que con el talibán tuerto que se tapaba la cara con una toalla.
ResponderEliminarAunque para Carl Sagan y ZP -por ejemplo- ambos puedan ser perfectamente intercambiables.
La anamnesis se refiere, para los platónicos a la parte del conocimiento auténtico o saber noumenos que parte de las ideas y que es intrínseco a todas las criaturas creadas que participan de él según sus diferentes grados de perfección. Si, no se puede olvidar sin dejar de ser...
ResponderEliminarZP no distingue a Santo Tomás de Aquino del moro santo Ibrahim, Carl Sagan, en cambio, tenía las ideas un poco más claras: "esos malditos fabricantes de transistores que no tienen moral" (hoy diríamos chips...
En un libro de cf tenían unas pastillas de anamnésis que les daban a los que recibían el tratamiento gerontológico que alargaba la vida hasta los doscientos cincuenta años. Y es que a partir de los docientos años la gente empezaba a olvidar cosas y tener dejavús constantes.
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