Santo Tomás III: la estructura de la realidad

En los tiempos de Santo Tomás de Aquino estaban de moda 2 teorías sobre el origen del mundo:

• la doctrina cristiana de la creación, que subraya la diferencia entre Dios y el resto de los seres, que son contingentes, es decir, podrían no existir


• la neo-platónica (Plotino, entre otros), que habla de una emancipación, una participacón en la sustancia divina

La tradición neoplatónica distingue a Dios, principio primero por su absoluta simplicidad, mientras que la filosofía cristiana y agustiniana afirma que todas las realidades excepto Dios son compuestas de materia y forma. En la actualidad, J.J. Benítez sigue entendiendo a Dios como una "especie de energía".

Santo Tomás no lo acepta, en parte porque creía en los ángeles... La composición de esencia y existencia es lo que verdaderamente distingue a las realidades creadas. Los seres creados se componen de esencia y existencia, pues en su esencia no está la existencia, podrían no existir (principio de contingencia). Sólo en un ser necesario (que no puede no existir) esencia y existencia es lo mismo. Neil Gaiman y otros autores llegan a una conclusión semejante al final de los comics de Lucifer.

En la 1ª parte de Summa Theologica, el primer artículo trata de porqué Dios no es evidente, el segundo explica que si es demostrable y en el tercero intenta razonar la existencia de Dios a través de las 5 vias tomistas. Este razonamiento parte de tres supuestos: tiene como punto de partida el mundo exterior (con los pies en el suelo), existe un principio de causalidad (la causa antecede a su efecto) y la verdad es un proceso lógico (es obvio que existe la verdad, ya que si no existiera, sería verdad que la verdad no existe). Las cinco vías son las siguientes (la última es la que hace pupa):

1. Dios es el motor del movimiento, entendiéndole como acto puro


2. Vía de la causa eficiente primera


3. Vía de los seres contingentes y los necesarios


4. Esta en la cima de la jerarquía de valores (como la Idea de Bien suprema)


5. Existe un Orden, físico y teleológico en el universo

La esencia (lo que las cosas son) equivale a la potencia aristotélica y la existencia es el acto de la esencia. Como las existencias no son iguales, sería más correcto hablar de composición de esencia y ser. El acto de ser o existencia se manifiesta según aquellas esencias a las que actualiza (como un programa operativo) y su perfección depende de la esencia o potencia. Como Dios no tiene limitaciones e incluye toda perfección posible, su esencia es su ser y por ello el mismo subsistente. Los seres creados participan del ser en grados distintos según sus esencias. Este es un guiño a los neoplatónicos, rechaza en cambio a San Anselmo de Canterbury, pues si entre existir y no existir es más perfecto existir pero sólo en el pensamiento de unos seres que son imperfectos, que se pueden equivocar, lo que invalida este razonamiento.

Tomás de Aquino murió prematuramente en la provincia de Latina, un 7 de marzo de 1274). Es conocido también como Doctor Angélico y Doctor Común.